Una vez se dispone del material para preparar la partida, un anfitrión ha de preparar también a sus jugadores para la murparty.
Motiva a tus jugadores
Tus jugadores tienen que estar motivados y con ganas para jugar. Para conseguir esto puedes hacer uso de distintas estrategias:
- Haz marketing de la partida, diles que se lo van a pasar muy bien y que van a disfrutar.
- Elige un sitio que les llame la atención para el desarrollo de la partida. Puede ser simplemente una casa pero asegúrate de que vayáis a estar cómodos.
- Ambienta tus partidas proporcionándoles con tiempo las hojas de personaje y alguna pincelada sobre la temática de la partida.
- Ambienta tus partidas colocando attrezzo en la zona de juego. Esto te servirá para que tus jugadores guarden un buen recuerdo para próximas partidas.
- Anima a los jugadores a disfrazarse, pueden usar las hojas de personaje como guía pero no pasa nada si añaden algún toque personal propio que encaje con el personaje.
Haz que tus jugadores se metan en su papel
Es muy importante tener en cuenta que este tipo de juegos son juegos de rol. Es por ello que cada jugador debe meterse en la piel de su personaje y actuar como si fuese él. Debe entender cuáles son sus motivaciones y sus miedos y actuar en consecuencia. Por supuesto que es imposible que una persona elimine su personalidad completamente incluso en un juego. No obstante aquí parte del objetivo es convertirse en un buen actor y para ello los jugadores deberán pensar y actuar como lo haría su personaje. Por supuesto, todo lo anterior teniendo en cuenta que es un juego y nunca deben llevarse a cabo acciones que perjudiquen a los otros jugadores o pongan en riesgo su seguridad.
Para esto también ayuda la vestimenta, que en el apartado anterior se indicaba era un punto importante a la hora de motivar. El vestuario va a ayudar a crear ambiente y puede facilitar que unos y otros asuman mejor su papel.
Como anfitrión no tengas miedo a la hora de asignar personajes
Al hilo de lo dicho anteriormente, no te cortes ni un pelo a la hora de asignar personajes. No busques que un personaje encaje más con la personalidad de uno de tus jugadores, ¡prueba al revés! Un chico puede tener el papel de una chica y viceversa, o la persona del grupo que sobresalga habitualmente puede convertirse en el personaje tímido que intenta pasar desapercibido ante los demás. Un cambio respecto a las personalidades de unos y otros es un reto a la hora de jugar.
En las primeras partidas quizá no es necesario que busques cambios radicales, pero si tus jugadores se animan ve probando en las siguientes partidas y valorad qué pasa, ¿la partida ha sido más divertida? ¿a la gente le gusta probar distintas personalidades en los juegos?
Por lo mismo, no encasilles a nadie en el papel de bueno o de malo. Deja que tus jugadores prueben distintos papeles para que también tengan variedad de retos en los diferentes juegos en los que participen y no se cansen.
Después de la partida
El después de la partida también es importante para enganchar a los participantes de tus murparties. Si has hecho fotos de la partida, mándaselas por e-mail unos días después o publícalas en las redes sociales si tienes el consentimiento de todos. También puedes aprovechar el material que vaya publicándose en este blog en relación a las distintas historias (sin spoilear el argumento) para mantener vivas las ganas de jugar hasta la próxima partida. Ojo, tampoco te pases, que si pasas a modo spammer entonces lo mismo obtenemos el resultado contrario.